Creta

Siguiendo el sabio consejo de mi amigo Martín me levanté temprano para visitar las ruinas de knossos y así eludir la masa de turistas que llegan después de las nueve. Como era muy temprano (7) me fui caminando, 5 kilómetros llanos es accesible, y llegué justo antes de que abran. Las ruinas de knossos es donde transcurre la leyenda del Minotauro y el rey Minos. Representa el esplendor de la cultura minoica. No sólo son piedras, el arqueólogo Sir Evans invirtió 35 años y £250.000 de su propio dinero para reconstruir el palacio. Después de recorrer en detalle y tomar unas fotos casi en soledad me retiré y comenzaron a llegar turistas de a cientos! Aproveché la cercanía para visitar la región donde se produce la mayoría del vino en Creta. Después de un pequeño tour por la bodega realicé la clásica degustación y me regalaron una botellita de un tercio de vino tinto. Por la tarde visité el museo arqueológico de Creta, me interesaban los frescos originales de Knossos y me maravillé con los adornos que usaban las mujeres 1500 a.c. Un detalle importante: usaban anzuelos como los conocemos actualmente pero de bronce. Luego camine por el puerto hasta las murallas y fortalezas venecianas y llegué nuevamente al punto de partida: la famosa fuente del León o también llamada Fuente de Morosini.